El embarazo es uno de los momentos más importantes para una mujer y su familia. Cuando una mujer se realiza una prueba de embarazo, y resulta positivo, inicia una nueva etapa de salud llena de emociones. Esta etapa viene acompañada de dudas y preocupaciones.
¿Cuándo deberia empezar el control del embarazo?
El seguimiento gestacional debe empezar cuando sospeches que estás embarazada.
Cuando tengas un retraso de regla superior a los 15 días.
Si hace 6 semanas desde la ultima vez que te vino la regla.
Si te haces una prueba de embarazo en orina y esta resulta positiva.
Si tienes un retraso menstrual y aparecen pérdidas de sangre o dolor abdominal.
Cuando una mujer conoce estar embarazada debe llamar a su ginecólogo - obstetra de confianza para solicitar visita. Habitualmente la primera visita se gestiona hacia las 8 semanas, momento en el que ya se verá por ultrasonido la presencia del bebé dentro del útero de la madre.
¿Cómo es el control de un embarazo?
El seguimiento del embarazo se realiza con frecuencia y regularidad según las semanas para vigilar posibles alteraciones o trastornos que puedan identificarse antes de dar los problemas o complicaciones maternas.
Habitualmente, en las citas mensuales de las embarazadas, se realiza varias pruebas a las mujeres. El control del peso, la toma de la tensión arterial, tests y estudios analíticos para detectar enfermedades, complicaciones y controles con ultrasonidos para conocer el estado del feto o el bebé.
Estas pruebas, según las semanas de gestación, son importantes para evitar que la madre deba acudir al hospital por complicaciones maternas o fetales. El bebé y la madre son lo más importante.
Durante el control del embarazo o gestación, siempre intentamos que nuestra asistencia a la madre y su familia sea personalizada, humana, y al mismo tiempo muy profesional.
¿Cuáles son los controles del embarazo?
A modo de resumen, y para facilitar su entendimiento, lea la lista explicativa de los examenes que se realizan en el embarazo.
1ª visita (8-12 semanas): Se abre la historia clínica y se solicita la analítica de primer trimestre.
2ª visita: Se realiza ultrasonido de primer trimestre (11 -14 semanas). Y con esta información se pide la analítica de diagnóstico prenatal. Es el primer contacto con el bebé.
3ª visita (15-16 semanas): Se informan de los resultados del diagnóstico prenatal. Además y si está indicado una prueba de procedimiento invasivo. También se informa de la posibilidad actual de diagnóstico prenatal según ADN fetal en sangre materna.
4ª visita: Se realiza ultrasonido de segundo trimestre (19-21 semanas). Este estudia la morfología del feto.
5ª visita (21-22 semanas): Se solicita la analítica materna de segundo trimestre.
6ª visita (25-26 semanas): Se dan los resultados de la analítica de segundo trimestre. En esta visita también se informa del ultrasonido 2D y 3D a las mujeres.
7ª visita (29-30 semanas): Se administra la vacuna Anti-D, si la mujer es Rh negativo. También se informa de la vacuna de la Tos Ferina. Si la paciente lo desea, se realiza en estas semanas nuevamente un ultrasonido.
8ª visita: Se realiza ultrasonido de tercer trimestre (32-34 semanas). Este estudia el crecimiento del feto. En esta visita se informa de la posible donación de sangre de cordón umbilical.
9ª (36-37 semanas): Se solicita a la madre la analítica de tercer trimestre y se realiza frotis vagino-rectal para detectar el Estreptococo B Agalactiae. Se dan los consentimientos informados necesarios para la asistencia al parto.
10ª (38-39 semanas): Se comprueba que toda la información necesaria para el parto esta disponible. Se pueden iniciar las pruebas de estudio de bienestar fetal.
11ª (40 semanas): Pueden realizarse pruebas de estudio de bienestar fetal.
12ª (41 semanas): Pueden realizarse pruebas de estudio de bienestar fetal. Esta controla el buen estado del bebé. Se informa de la posibilidad de realizar la inducción del parto si la mujer no se pone de parto sola.
¿Cuándo hay que ir al ginecólogo?
En la gestación debes ir o consultar al ginecólogo siempre que tengas alguna duda o preocupación. Algunos de los síntomas que no debes ignorar y por los que tienes que consultar o realizar una visita:
Si notas una reducción de los movimientos fetales.
Crees que tienes infección: puedes tener una infección si tienes fiebre, dolor al orinar, dolor abdominal o a nivel lumbar, o presentas sangre en la orina. Los vómitos o diarreas, acompañados de fiebre pueden ser signos de infección.
Si presentas signos de trabajo de parto antes de la semana 35 (amenaza de parto prematuro): contracciones regulares, y/o la expulsión del tapón mucoso (mucosidad que se elimina vía vaginal cuando hay modificaciones del cuello del útero). También puede aparecer rotura de la bolsa de las aguas, dolor de espalda, vómitos, náuseas, y diarrea.
Sensación de picor en el cuerpo: la picazón leve o grave, que afecta especialmente a las manos y a los pies, pueden ser signos de colestasis intrahepática del embarazo.
Si debutas con retención de líquidos (hinchazón en los pies, tobillos, cara o las manos): la hinchazón repentina puede indicar la aparición de preeclampsia (estado hipertensivo del embarazo). Otros síntomas de la preeclampsia son: dolores de cabeza (especialmente aquellos que no desaparecen con analgésicos simples). Si se hincha una sola pierna también es importante y no debe ser ignorado, ya que puede ser un signo de una trombosis (coágulo en la pierna).
Tienes náuseas o vómitos frecuentes.
Ante dolor abdominal.
Si tienes problemas visuales.
Crees que puedes tener diabetes gestacional, ya que tienes antecedentes en la familia.
Otros signos o sensaciones por las que también debes consultar
Aumento de la sed.
Cansancio extremo.
Pérdida de peso inexplicable.
Visión borrosa.
Flujo vaginal abundante o sangrado.
Sensación de desmayo y mareo.
Cualquier otra sensación que te preocupe.
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